¿Cuántas cáscaras de naranja has desechado a lo largo de tu vida? De media para hacer el zumo perfecto con Citring One, usas tres… ¡Imagínate! En este artículo vamos a ver 3 maneras de reutilizar la piel de la naranja, ya que contiene un sinfín de propiedades y beneficios que puedes aprovechar en tu día a día, para hacer tu vida un poco más sostenible.
Infusiones aromáticas
Una de las formas más fáciles de reutilizar las cáscaras de las naranjas es infusionándolas. Añadirán un toque cítrico delicioso a tus infusiones y tés.
Para ello, solo necesitas quitar bien la parte blanca del interior de la piel de naranja, para evitar que dé un sabor amargo a la infusión. A continuación, corta las cáscaras en tiras finas, para que se sequen más rápido. Para secarlas de forma sostenible y ecológica, puedes hacerlo al sol, colocando las cáscaras sobre una bandeja sin que se superpongan, usando un paño o rejilla para que no se vuelen con el aire. Coloca la bandeja en un lugar soleado y seco, y deja secar entre 1 y 3 días. Puedes ir revisando las cáscaras y darles la vuelta si fuese necesario.
Cuando las cáscaras estén completamente secas y duras, estarán listas para usar en infusiones. Puedes conservarlas en un tarro de cristal hermético, para que no se humedezcan.
Para preparar tus infusiones, es tan sencillo como coger un par o tres de trocitos de cáscara y añadirlos a tu taza. Vierte agua caliente, sin que llegue a hervir, y deja infusionar entre 5 y 10 minutos. Puedes combinar las cáscaras de naranja con canela Ceylán, cúrcuma o jengibre, que le aportarán un toque antiinflamatorio a tu infusión.
Productos de limpieza ecológicos para tu hogar
Otra manera de reutilizar las cáscaras de las naranjas es elaborando un limpiador para tu hogar. Es tan sencillo como colocarlas en un frasco de cristal con tapa y llenar el envase con vinagre de limpieza hasta cubrir completamente las cáscaras. Deja reposar esta mezcla un par de semanas y posteriormente cuélala. Tendrás tu limpiador ecológico que además dejará un olor agradable en toda la casa.
En esta ocasión, es preferible usar las cáscaras frescas para potenciar la liberación de los aceites esenciales, en concreto el limoneno, que es el compuesto responsable de sus propiedades de limpieza desengrasantes y quitamanchas.
Fertilizante natural para plantas
Otro de los grandes usos de las cáscaras de las naranjas es el de actuar como fertilizante para tus plantas, gracias a su contenido en micronutrientes como potasio, fósforo, calcio y magnesio. Puedes triturarlas y añadirlas en la tierra de tus plantas o en el jardín. La descomposición de las cáscaras de las naranjas libera nutrientes clave para el crecimiento de las plantas. Además, su contenido en limoneno ayudará a prevenir plagas. Es importante usarlas con moderación para no alterar demasiado el pH del suelo. No obstante, usarlas como fertilizante es, sin duda, una opción ecológica y sostenible para el cuidado de tus plantas y del planeta.